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Este estudio en ratones sugiere que existe una posibilidad de que parte del riesgo de padecer depresión u otras alteraciones relacionadas con el estrés pueda estar determinada por la exposición al estrés del padre. El próximo paso será hacer el estudio en humanos. Tanto la depresión como otras alteraciones relacionadas con el estrés necesitan de la genética y de los factores ambientales para desarrollarse. Actualmente se estudia la intervención de otro factor, la epigenética, es decir, cómo las primeras experiencias de un individuo pueden hacer cambiar la genética sin haber alterado la secuencia del DNA. David M. Dietz, Quincey LaPlant, Emily L. Watts, Georgia E. Hodes, Scott J. Russo, Jian Feng, Ronald S. Oosting, Vincent Vialou, Eric J. Nestler. Paternal Transmission of Stress-Induced Pathologies. Biological Psychiatry, 2011; 70 (5): 408 DOI: 10.1016/j.biopsych.2011.05.005
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